|
FÓRMULA 47 - SALSA Á LA ROSALÍA
Píquese un apio, y póngase en agua hirviendo hasta que se ablande y
despachurre fácilmente. Pásese por el tamiz, y se le añade leche
caliente para que la salsa no resulte demasiado espesa, sazonándola con
sal y pimienta. Incorpórese poco á poco una yema de huevo bien batida, y
exprímase el zumo de un limón.
Se sirve con carne de ave cocida al puchero. |